Descripción
La cola de conejo, al igual que la cola fuerte, se ha empleado tradicionalmente en el mundo del mobiliario. Se suele utilizar principalmente para fijar la pintura y el dorado. No sirve para encolar superficies de grandes dimensiones ni elementos estructurales, ya que posee una baja resistencia a la tracción. Originalmente la cola de conejo se fabricaba exclusivamente a partir de la piel del conejo.